Que alegría ver cómo La Azotea Azul ha tomado forma. Todo gracias a tantísimas aportaciones que hemos recibido desde el principio. Hemos tenido la suerte de contar con la colaboración de muchas personas, empresas y sus trabajadores. Todos ellos han participado para que los niños y niñas ingresados en el Hospital Universitario Virgen del Rocío tengan ese espacio al aire libre donde jugar y disfrutar con sus familias, además de tratar de recuperarse en el mejor ambiente posible.
Hemos tenido la ayuda de empresas como Pórtico Gestión, quienes han tenido la generosidad de regalarnos la instalación completa del césped y dejarnos a muy bajo coste la del caucho. ¡Gracias de corazón! ¡Qué contaros del personal que vino a instalarlo! Encabezados por Sergio y Fernando, ahí han estado Juanma, Roberto, Kike… y no una, ni dos ni tres veces… superando todas las adversidades que iban apareciendo, ellos siempre respondían “tranquilos, volvemos las veces que hagan falta”. Y lo están cumpliendo hasta que terminemos. Gracias!
Cuando vemos que el momento de que los niños y niñas puedan pisar ese césped está tan próximo nos invade una gran sensación de felicidad. Estamos expectantes ante la inminente llegada del momento de dar vida, por fin, a la Azotea Azul. Gracias a todos y todas los que habéis colaborado, ya que sin vuestra ayuda todo esto no hubiese sido posible.
